Merendando con Mickey

Cuando mis hijas eran pequeñas y estuvimos en Eurodisney, compramos este juego de tazas con los personajes de Disney. Cada uno de nosotros eligió el que le era más afín. (No os digo cuál es el mío, je,je). Desde entonces, las han usado en muchas merendolas. Ahora que ya son mayores, las seguimos sacando sobre todo en nuestros desayunos más especiales: Reyes, cumples, Día de la Madre… o cuando nos apetece hacer un brunch. Como este fin de semana lo hicimos, he aprovechado a enseñaros cómo solía preparar una pequeña mesa para que se tomaran un chocolate con las amiguitas.

–Escogí un mantel liso, pero llamativo, de color amarillo fuerte para que fuera animado y las servilletas azul marino a juego con la cafetera.

–Para servir el chocolate, usé una cafetera azul añil, que es de un juego de café esmaltado que me regalaron hace muchos años, con la lechera y el azucarero a juego.

–Coloqué las galletas en dos bandejitas, amarilla y azul para entonar, que en realidad son rabaneritas sueltas compradas hace años en la tienda Casa.

La vajilla, con las serpentinas
A falta de porcelana, dispones de maravillosos modelos de platos y servilletas con personajes de Disney, Cartoon, cómics, etc. y otros divertidos motivos en papel en las tiendas tipo Party Land, Party Fiesta… en la mayoría de los centros comerciales.
El tazón puede ser uno tuyo grande de desayuno o un vaso de plástico, ahora los hay de gran formato.

Mantelerías antiarrugas

Que sólo tienes dos o tres manteles, aparte del hule de vichy que pones en la cocina a diario. Sin contar, claro, con ese de hilo para las grandes ocasiones que siempre te piensas una y mil veces usar, porque ¡a quién no le da pereza plancharlo…! No hay problema, tampoco hace falta que tengas una tienda de manteles en casa para poner unas mesas variadas. La solución está en olvidarte de los manteles de tela y comprarlos de papel. Así puedes cambiar más de colores y ¡olvidarte de la plancha!

Pantone empapelado
Si te animas, acabo de descubrir una tienda que vende los manteles de papel en rollos, de todos los colores que te puedas imaginar y con las servilletas a juego. Se llama Gifi y es una especie de enorme bazar de todo a 100, donde hay de todo. Pero este es un batiburrillo muy bien organizado, con todo etiquetado, al gusto francés y, lo mejor, ¡a un precio colosal! Por si quieres buscarlas, hay tiendas de la cadena francesa Gifi en Parla, Barcelona y Tarrasa. Su página web en Francia es: www.gifi.fr, aquí todavía no tienen.

Si no las tienes cerca, otra opción, es ir a los almacenes de Makro. No disponen de tanto surtido de colores, pero sí tienen los básicos.

Para quedarse helad@

Había llegado la hora, ya no podía posponerlo más. Porque, con qué ilusión colocas la decoración navideña, pero luego desmonta árbol, baja guirnaldas, quita bolas… ¿Os suena? Pues bien me puse a la aburrida tarea de todos los años de "guardar lo de Navidad" y, mientras recogía, me topé con el objeto que inspiró esta decoración escarchada: un árbol de piñas nevado. Evocaba el gélido invierno de enero y en torno a ello decidí montar la mesa:

-Vidrio transparente en cristalería y paneras, metal plateado en los bajoplatos y blanco en el mantel, las servilletas y la vajilla fueron los colores elegidos.

-Las tostadas y los picos los puse esta vez en bandejitas de cristal.

-Coloqué a ambos lados del árbol velas, pero de manera asimétrica (1 y 3 a otro lado) y distintas.

Luces on the rocks
Las velas plateadas por sí solas hubieran conseguido el "efecto congelante”, pero se multiplica si debajo se las coloca una bandeja metálica. ¿Y si además se las añaden unos hielos? Si son como los míos, unas estrellitas de cristal, ¡no se derretirán!

Desde que compré en Ikea estos portavelas de cristal, les estoy dando un tute... Aquí los veis usados como platitos bajo un cuenco para para aperitivo.

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Bancos de ideas

La mayoría de las veces yo también me quedo seca… de ideas y entonces recurro a un truco que estimula mis neuronas: me pongo a mirar catálogos, que me recrean la vista, me entretienen y aportan mil y una imágenes de composiciones decorativas que se me quedan en la trastienda de la memoria. Luego, cuando menos me lo espero, las asocio y las recupero para poder usarlas cuando las necesito, interpretadas a mi manera, en las siguientes decoraciones de las mesas.

Casi todos los catálogos están ya online, así que lo único que tienes que hacer es teclear el nombre de la tienda y ponerte bucear. Luego a imaginar.
Y queridas amas de casa en crisis hojear catálogos es, además, ¡¡¡gratis!!! Si de paso ves en ellos algún capricho que puedas pedirte para tu cumple, mejor que mejor…

Amplias miras
Brujuleando por catálogos se tiene la ventaja de que, si coges algunos extranjeros, tu mirada traspasa fronteras. En ellos ves cómo se decoran las mesas en otros países o incluso en otros continentes, cuáles son sus tradiciones en Navidad, cómo ponen los veladores en los jardines, con qué montan sus fiestas infantiles, sus meriendas...

Los Reyes de oros

En la víspera de Reyes tuvimos amigos a comer. Como en la mesa anterior que monté para el día de Navidad había sido tan comedida en brillos, me apetecía que en esta luciera más el oropel digno de esta fecha majestuosa.
Por eso, empecé por elegir una vela dorada dentro de una estrella con bordes con chispitas de purpurina para montar el centro. A los lados coloqué ramas de pino (artificial, no os penséis, recicladas de las que uso para los adornos) y las decoré con bolitas y estrellas doradas. En la mesa mandaba el verde y el dorado, ya todo lo demás iría a juego:

-Puse el mantel de color champán y las servilletas verdes (de otra mantelería) para entonar.

-Escogí una vajilla en tonos dorados y verdes (heredada de mi madre), así como la cristalería verde, que también era de mi madre.

-Coloqué bajoplatos y paneras dorados para rematar y realzar el brillo a la mesa.

Brillan más que el Sol
¡Y es verdad! Dos cuenquitos de cristal sobre dos platitos dorados, mira cómo resplandecen. Servir aquí los aperitivos de queso roquefort y mantequilla aprovechando las paneras doradas lucen mucho más.

Bye, bye Xmas

Uff, la Navidad es terrible!! Tantas fiestas seguidas me han dejado sin aliento, con un par de kilos de más y con el blog tan anticuado que ¡se me ha quedado del año pasado! Ahora que las aguas se calman y vuelven a su cauce, prometo ser más regular.
En este momento tengo dos mesas navideñas pendientes, así que tengo que apremiar. Esta de hoy que enseño es la que monté para el día de Navidad.

En un bonito tartero de mesa con pie que tengo, había preparado un adorno navideño con velas, piñas y acebo artificial. Al verlo, se me ocurrió que este año podría ser el centro principal de la mesa. Dicho y hecho. A partir de ahí fui configurando así la decoración del resto:

-Escogí un mantel color marfil para que todo resaltara bien y servilletas roja
-Rematé el centro con ramas de pino artificial a los lados
-Puse unos bajoplatos rojos, que dan siempre una nota navideña
-El menaje que elegí para entonar fue la vajilla blanca y la cristalería roja

Con buena estrella

No tenía servilleteros bonitos pero, de repente, se me encendió la lucecita: ¿por qué no utilizar unos de los adornos que cuelgo del árbol de Navidad para colocar en las servilletas? Como eran de estrellas, campanas, arbolitos, casitas de chocolate, botas de Papá Noel… pues eran muy apropiados.

Otra idea estelar para animar y dar color
a la mesa: unos toquecitos
de estrellitas rojas a juego
con los bajoplatos y colocar
encima las paneras transparentes.