Y tan dulce, porque en estas fechas todas nos pasamos endulzándonos los días de fiesta. Quizá por eso, anticipándome a los turrones,
los mazapanes, guirlaches y tantos polvorones que van a invadirnos en breve,
tuve un antojo goloso y la mesa que monté el pasado fin de semana era chocolate
puro: en ella predominaba el color marrón, pero mezclado con el rojo, tono
clásico de la Navidad.
En efecto, fui combinando ambos colores y sólo estos dos:
desde el centro de mesa, que en esta ocasión lo monté colocando una corona de frutos rojos y en su
interior un frutero de madera que rellené con piñas, velas y bolas rojas, hasta todos los
demás elementos.
–En la mesa, los rojos estaban reservados para el mantel, los bajoplatos, la cristalería y las paneras.
–En la mesa, los rojos estaban reservados para el mantel, los bajoplatos, la cristalería y las paneras.
–El camino de mesa, las servilletas y los platos son los elementos que escogí para que salpicasen de marrones el setting.
- El tartan escocés siempre me ha evocado la Navidad. Por
eso, para decorar los platos dispuse lazos de los del árbol de Navidad que este año no he colgado.
Con frutos y piñas
En estas dos fotos os enseño el paso a paso de cómo monté fácilmente este vistoso centro navideño.
Fotos y tablesetting: helenstables.blogspot.com |
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